Zapatero a tus zapatos

Dicen que el refranero popular es muy sabio. En este caso quiero resaltar uno que se refiere a que cada uno debe hacer lo que realmente sabe hacer o aquello que debería saber hacer.

Los departamentos de Recursos Humanos suelen tener una visión muy global del negocio. Conocen muchas áreas de forma superficial y pocas con la profundidad de los profesionales que se dedican a ellas día a día. A pesar de ello, sucede como con el fútbol o la política: todo el mundo es un experto aunque no tengan ni idea de qué están hablando. Por ello, suele ser tentador opinar en ciertos foros sobre la gestión que se lleva a cabo en otros departamentos. Criticar desde la barrera es fácil y gratis, pero en el entorno laboral, esto tiene un efecto boomerang que se nos volverá en contra, ya que los demás también podrán opinar gratuitamente sobre nuestro trabajo, sobre aquello en lo que se supone que somos los especialistas.

El respeto por la profesionalidad de nuestros compañeros es fundamental. Debemos exigirlo en aquellos campos técnicos relacionados con la gestión de personas, pero el respeto debe ganarse diariamente cumpliendo varios requisitos. Sin duda, el más importante, es dando el mismo respeto que pedimos. 

No digo que no se pueda sugerir u observar sobre la organización o la metodología de cualquier área, pero siempre desde la humildad y con el afán de ayudar, no de colgarnos medallas delante de gerencia. 

Nuestro trabajo se centra en la confianza. Sin ella, nada tiene sentido. Pero cuando delante de algún superior cuestionamos "a traición" a algún responsable de área, perdemos toda nuestra credibilidad frente a todo el equipo.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Echa la culpa a otro. Serás mediocre pero feliz

Delegar no es asignar tareas

Ventajas y desventajas de la subcontratación